Con el Proyecto Supermercado pretendo que el alumno no solo desarrolle su competencia matemática, sino que a la par adquiera una competencia lingüística funcional y realista.
¿Cómo trabajamos estas dos competencias de manera transversal?
Toda actividad matemática desarrolla diferentes aspectos lingüísticos ¿verdad que cuando realizamos un problema matemático también trabajamos la lectura al leer el enunciado? Bien, pues esto es lo que pretendo llevar a cabo en el aula de apoyo a la integración, un aprendizaje interrelacionado. Los contenidos ofrecidos en este proyecto son infinitos, operaciones básicas, resolución de problemas, uso de monedas y billetes, las cantidades, los porcentajes, descuentos y aumentos, números decimales, la fracción como número decimal, etc...Para ello creamos facturas de compras hechas para el mes o para el día partiendo de nuestro folleto publicitario, realizamos un menú saludable y calculamos su precio, comprobamos si los descuentos de diferentes propagandas comerciales son correctas, investigamos y analizamos los productos más y menos saludables, calculamos mentalmente el 50% de diferentes productos, supervisamos facturas reales de diferentes comercios, etc.... y todo ello, adaptado a las características del alumnado.
Como podéis ver, la infinidad de actividades que nos proporciona un folleto de publicidad son inimaginables.
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